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Atarax 25, 10 mg
Atarax
0.32Por pill

Ingrediente activo: hydroxyzine

El medicamento Atarax tiene un efecto analgésico antiespasmódico, simpaticolítico y leve. Atarax es eficaz en el tratamiento de la picazón en diversas dermatitis alérgicas, urticaria y eczema. La duración del efecto antihistamínico del medicamento aumenta a 96 horas con insuficiencia hepática. Bajo la influencia de la droga, aumenta la duración total del sueño, disminuye el número y la duración de los despertares nocturnos, disminuye el tono muscular y no se produce deterioro de la memoria. El medicamento ingresa rápidamente al torrente sanguíneo después de la absorción en el tracto gastrointestinal.

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Atarax: un antialérgico con propiedades ansiolíticas

Atarax es uno de los medicamentos más utilizados en nuestra vida. Es un antihistamínico, lo que significa que su propósito básico es actuar como un alérgeno, pero gracias a los avances y extensos estudios médicos, quizás también se pueda usar como ansiolítico.

Las enfermedades relacionadas con reacciones alérgicas son bastante comunes en nuestro entorno. No solo estamos hablando de esta "erupción cutánea" (que se refiere a un enrojecimiento de la piel, con ciertas pápulas), sino también de otras lesiones cutáneas importantes que ocurren cuando nuestro sistema no está bien equilibrado.

Estas reacciones están mediadas por alérgenos, pequeñas moléculas que se encuentran en el aire o que forman parte de la composición de organismos vivos e inertes. Nuestro cuerpo solo reconoce estas moléculas como "seres no deseados" y aquí es donde comienza toda acción.

Se libera rápidamente una gran cantidad de agentes y mediadores, listos para "detener" y evitar el paso de alérgenos, de modo que no puedan atacarnos. La verdad es que la mayoría de las veces estas moléculas no causan daños reales a nuestro organismo, y es solo que nuestro sistema inmunológico está sobreactuando y dando una respuesta mayor de la necesaria.

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Por esta razón, a veces necesitamos un medicamento que pueda detener estas reacciones innecesarias a tiempo, antes de que podamos complicarnos y la situación se vuelva mucho más difícil. Ahí es donde entra Atarax, un antihistamínico principalmente encargado de mediar la respuesta de nuestro cuerpo a estos famosos alérgenos.

Mecanismo de acción

La forma en que funciona Atarax es bastante compleja y vamos a hacerlo lo más simple posible. Debemos saber que la acción depende de varias áreas del sistema nervioso central, especialmente en el cerebro, aunque tiene efectos que se extienden por todo el cuerpo.

Lo que hacen los antihistamínicos es que bloquean los efectos de la histamina, uno de los mediadores más importantes en el desarrollo de reacciones alérgicas. Según los especialistas, la histamina es responsable de estimular la producción de otros mediadores e incluso glóbulos blancos especializados que aumentan las reacciones alérgicas.

Al bloquear la histamina, no solo estamos evitando la aparición de síntomas típicos de las reacciones alérgicas, sino que también podemos revertirlos. Cabe señalar que, dado que su efecto es a nivel central (en el cerebro), también se puede considerar para otras funciones importantes, como prevenir los vómitos y los trastornos de ansiedad.

Aun así, es necesario señalar que solo su médico sabrá cuándo es el momento adecuado para usar el medicamento y si existe alguna otra patología en la que su mecanismo de acción pueda ser realmente útil. Recordemos que no todos somos iguales, y no todos respondemos de la misma manera y con la misma fuerza a un medicamento.

Usos de Atarax

Como hemos mencionado desde el comienzo del artículo, hay varios usos importantes que deben destacarse. Sin embargo, solo su médico y especialista podrán recomendar el uso de este medicamento. Algunas personas lo usan por su cuenta sin la necesidad de consultar a un especialista, pero enfatizamos que no es lo ideal.

Anti alergico

El primer uso es el más convencional y el más hablado por todas las farmacias. Es su capacidad innata para bloquear la producción de histamina y, por lo tanto, la mayoría de las reacciones que tienen lugar en nuestro cuerpo cuando hay un alérgeno o una sustancia desconocida en contacto con nosotros.

Es importante enfatizar que hay varios tipos diferentes de reacciones alérgicas, dependiendo de la magnitud y el mecanismo de acción, algunos de los cuales podrían ser letales. Por ejemplo, cuando somos alérgicos a la toxina de la avispa y la conocemos, podemos morir rápidamente.

Atarax no es útil en los casos más graves de alergias, sino en aquellos que son más leves e involucran a otros sectores y otros síntomas diferentes. Por ejemplo, si sentimos algo de picazón o picazón después de tocar una planta desconocida, eso sería un síntoma leve de una reacción alérgica que este medicamento podría mediar con alta efectividad.

Por otro lado, algunas reacciones tardan más en aparecer, como el caos de la urticaria crónica donde hay "frijoles" en todo el cuerpo, y pueden comprometer rápidamente algunas otras regiones más sensibles como la laringe o la garganta. Es necesario enfatizar que, aunque podemos usar este medicamento, lo ideal es que tengamos a mano algo con mayor potencia.

Con todo esto queremos decir que Atarax no es un medicamento de "rescate" en el caso de reacciones alérgicas severas que justifican la terapia u hospitalización, sino que puede usarse como un medicamento común, incluso cuando lo prescribe su médico, para el tratamiento leve y moderado. reacciones alérgicas que tienen lugar especialmente en su piel.

Aún así, por supuesto, este es solo uno de los muchos usos de este medicamento. La clave de su éxito es que su efecto tiene un origen central, es decir, a nivel del cerebro. Por lo tanto, puede atacar varios sistemas al mismo tiempo.

ansiolítico

A medida que el mundo ha progresado, los trastornos psiquiátricos se han vuelto mucho más conocidos. Si bien puede sonar fuertemente relacionado con la psiquiatría, las enfermedades que causan ansiedad caen dentro de esa clasificación de medicina.

Para muchas personas, puede ser un problema que limita la forma en que se las arreglan en su vida diaria. Por esta razón, es importante que los trastornos de ansiedad se consideren y se les dé la importancia necesaria, y que se traten correctamente.

Aunque su especialista es el único que puede decirle qué tratamiento necesita, si tiene un problema psiquiátrico, debe saber que Atarax es una de las opciones disponibles.

Como se mencionó anteriormente, gracias a su efecto directo en nuestro cerebro, este medicamento puede desempeñar un papel importante en el desencadenamiento de trastornos de ansiedad, bloqueándolos y actuando como un potente ansiolítico.

Sin embargo, también es importante que sepa que estos efectos son diferentes para cada persona, por lo que la magnitud de la respuesta a este medicamento siempre variará mucho. Por esta razón, el uso como ansiolítico no es adecuado para todas las personas, sino para aquellos sensibles a su efecto central.

De todos modos, también es necesario mencionar que este medicamento ha logrado ser tan efectivo como las benzodiacepinas, las más mencionadas cuando se habla de ansiedad. Esto es positivo, dado que nos da una segunda opción para aquellos pacientes que son resistentes a la primera línea de tratamiento y continúan con las manifestaciones de sus propios trastornos.

Cómo se usa Atarax

Su médico debe darle las dosis apropiadas según el tipo de patología que se esté tratando. Recuerde, es diferente atacar un problema alérgico leve que curar un trastorno de ansiedad complicado, por lo que es necesario que las dosis varíen.

Dado que es un medicamento que actúa directamente sobre el cerebro, le recomendamos que no use cantidades mayores, e incluso menores, durante más tiempo del recomendado; Podría tener efectos nocivos perjudiciales. Este medicamento se usa solo por períodos cortos, debido a estos efectos en el sistema nervioso central.

Normalmente, el tiempo máximo de consumo es de cuatro meses. Una vez que haya completado ese período, lo importante es llamar y consultar con su médico para averiguar si debe cambiar su medicamento o si realmente funcionó. Si este no es el caso, no puede reutilizarlo, debe cambiar a otro tipo de medicamento.

Atarax viene en tabletas de 10 mg y 50 mg, presentaciones ideales para cubrir trastornos crónicos con alta efectividad. La adquisición de estas concentraciones a través de la suspensión sería un problema, necesitaríamos demasiado líquido para poder cubrir la misma cantidad de medicamento. Las tabletas tienen diferentes recubrimientos, pero todas son sólidas.

Si es una forma líquida, especialmente cuando se usa para tratar alergias, le recomendamos que agite la suspensión antes de tomarla. Por otro lado, mida la cantidad de medicamento que va a consumir con la misma jeringa que el producto; Si no lo trae, pídale a su farmacéutico una cuchara o taza medidora.

¿Qué sucede si omito una dosis?

Lo más importante es volver a tomar la dosis olvidada tan pronto como lo recuerde. Sin embargo, debe estar muy atento al intervalo de tiempo y la siguiente dosis; si está muy cerca, es mejor esperar el tiempo necesario y tomarlo en el momento adecuado. Recuerde, si no hace las cosas de esta manera, podría aumentar la cantidad de drogas en su cuerpo de manera perjudicial muy rápidamente, lo cual es peligroso.

Sobredosis de Atarax

Es peligroso para nosotros aumentar la cantidad de medicamento que vamos a tomar. Como mencionamos a lo largo de este artículo, este medicamento puede actuar sobre el sistema nervioso central, por lo que causará varios efectos nocivos en nuestro cuerpo que incluso pueden provocar la muerte.

Por esta razón, si considera que consumió más de lo necesario o experimenta alguno de los síntomas mencionados a continuación, le recomendamos que vaya lo antes posible a la sala de emergencias más cercana para que un especialista lo evalúe.

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Algunos de los signos que nos hacen pensar que puede estar bajo una sobredosis son la dilatación de las pupilas, un síntoma clásico de sobredosis de Atarax: problemas respiratorios, visión borrosa, baja presión, latidos cardíacos rápidos, convulsiones, coma, delirio, desorientación, alucinaciones, y así.

Como puede ver, las alteraciones en el sistema nervioso terminan afectando todo nuestro cuerpo e incluso pueden llevarnos al coma. Como buen sedante, Atarax puede deprimir la acción de los músculos responsables de la respiración y provocar insuficiencia respiratoria rápidamente. Por esta razón, tan pronto como entienda que está bajo una sobredosis, solicite ayuda y vaya a la sala de emergencias.

Tenga cuidado y, para facilitar el trabajo de los médicos que lo van a tratar, lleve con usted el nombre del medicamento y la cantidad que ingirió. Además, no olvide mencionar que su médico lo recomendó y cuál es la enfermedad subyacente que tiene. Con esta información, los especialistas podrán proceder rápidamente y salvarle la vida.

En general, solo para hablar un poco al respecto, el tratamiento de esta sobredosis en particular está dirigido a dos cosas: controlar la insuficiencia respiratoria (apoyo) y mitigar los posibles síntomas que el paciente está experimentando. Lo primero que se hace, normalmente, es un lavado gástrico con intubación endotraqueal, dependiendo de la cantidad de medicamento ingerido.

Normalmente, se usa carbón activado, aunque no hay muchos estudios que respalden este efecto. Lo más importante, como se mencionó anteriormente, es monitorear el estado de las vías respiratorias y la respiración, con monitoreo continuo, así como el estado de nuestro corazón (a través del electrocardiograma o cualquier otro método disponible).

Recuerde que dado que este medicamento puede afectar directamente la presión arterial, otro punto importante es que la presión arterial también debe evaluarse con frecuencia. Finalmente, es necesario que el paciente permanezca más de 24 horas sin ningún síntoma para ser dado de alta del hospital. Recuerde que las reacciones a los medicamentos también pueden durar varios días.

En el caso de Atarax, no existe un medicamento que pueda considerarse como un antídoto específico. Según los estudios disponibles, el problema es que los efectos del medicamento son difíciles de tratar con los medicamentos que existen actualmente. Algunos autores proponen mitigar algunos de los síntomas con otras drogas también llamadas Physostigmine.

Sin embargo, para usar este medicamento, el paciente debe estar en excelente estado de salud y no haber consumido demasiado Atarax, ya que puede tener un efecto hepático muy peligroso. El resto de los síntomas pueden tratarse desde el principio básico del "tratamiento de los síntomas", independientemente de las posibles complicaciones secundarias.

Efectos secundarios

Debido a que tiene propiedades muy definidas en el sistema nervioso central, las reacciones adversas tienden a ser bastante posibles. Los más importantes son aquellos que están relacionados con el cerebro y su funcionamiento, aquí se destacan la sedación, falta de coordinación, problemas para caminar, mareos, hipersomnia, etc.

Algunos trastornos más graves, como se mencionó anteriormente, solo ocurren cuando hay una sobredosis de la droga. Aquí es donde entran las alucinaciones y las confusiones y los síntomas aún más graves.

Aunque muchas afirmaciones de que este medicamento, sin una sobredosis, podría causar trastornos alucinatorios graves o actuar como un sedante tan poderoso que conduce a insuficiencia respiratoria, la verdad del caso es que no ha sido probado por ningún estudio científico. Por ahora, solo permanecen como mentiras.

Otros efectos secundarios incluyen problemas generales, como los que afectan el sistema gastrointestinal: diarrea, náuseas, vómitos, etc. Incluso puede haber estreñimiento (causado por el mismo efecto sedante, que termina "apaciguando" nuestro sistema digestivo) y sequedad de boca. .

Además, otros síntomas importantes son la hipotensión y el tinnitus, que ocurren en un bajo porcentaje de la población. Es necesario mencionar que este medicamento está bastante relacionado con las benzodiacepinas, por lo que también podemos esperar otros efectos secundarios como los que vemos con estos medicamentos.

Aun así, es necesario enfatizar que, en comparación con las benzodiacepinas, Atarax es un medicamento seguro que afecta mucho menos a nuestro sistema en general. Los efectos adversos y las reacciones no deseadas son mucho menores para este último.

Algunas recomendaciones y precauciones antes de usar Atarax

No todos los pacientes pueden usar este medicamento libremente. De hecho, hay varias contraindicaciones importantes que mencionaremos más adelante. Su médico debe evaluarlo por completo para ver si es candidato para Atarax.

Primero, debe informar a su médico si es alérgico a otros medicamentos como Atarax, como la cetirizina o la levotirizina. Si ha tenido reacciones adversas muy potentes con estos medicamentos, es mejor no tomar Atarax, ya que puede contener compuestos similares que causan los mismos efectos.

Además, debe hablar con su médico sobre cualquier posible problema que pueda tener con su cuerpo como resultado de alguna otra enfermedad crónica que pueda estar sufriendo. Algunos ejemplos importantes son problemas con los pulmones (como asma), ojos (glaucoma), intestino, tiroides, urinarios, etc.

Con especial cuidado, hable con su médico sobre cualquier problema cardíaco que tenga. Aunque los casos son bastante raros, Atarax puede causar alteraciones en la frecuencia y el ritmo de los latidos del corazón, por lo que debemos cuidarnos nosotros mismos.

Como sabemos, este medicamento también puede causar hipotensión, lo que elevaría la frecuencia cardíaca de forma secundaria. Esto es especialmente importante en pacientes que tienen problemas cardíacos basales, como hipertensión o cualquier problema rítmico (fibrilación auricular).

Si tiene diabetes o cualquier otro problema de glucosa, debe saber que este medicamento (en forma líquida) puede contener azúcar, lo que alterará el metabolismo en su cuerpo. Para evitar agravar su problema basal, lo más importante es que no consuma la forma líquida de este medicamento.

Los adultos mayores y los niños, por otro lado, son dos objetivos fáciles para este medicamento. Según los estudios disponibles, estas dos poblaciones parecen ser más sensibles a los efectos secundarios de este medicamento. Por esta razón, si es necesario usarlo, le recomendamos que tenga mucho cuidado.

En cuanto a los datos relacionados con la leche materna y el embarazo, la verdad es que todavía faltan muchos estudios para confirmar esto. Por esta razón, creemos que es mejor usarlo solo en ocasiones extremas, evaluando la tabla de "riesgo-beneficio", para averiguar si vale la pena.

El hígado y el riñón son dos órganos con los que debemos tener especial cuidado. Este es un medicamento que se metaboliza ampliamente en el hígado, por lo que cualquier otro medicamento que se metabolice en el mismo lugar podría saturarlo y crear los efectos nocivos de una sobredosis. Incluso si el paciente tiene alguna lesión hepática, también es muy probable que se acumule demasiado Atarax.

El riñón, por otro lado, es la ruta de eliminación preferida para este medicamento, por lo que es el mismo que para el hígado. Si tenemos un riñón sano, no hay problema. Pero si tenemos complicaciones en nuestros riñones, como enfermedad renal, es mejor no tomar este medicamento.

¿Debo tomar Atarax?

Para ser sincero, depende de cada paciente que pueda o no tomar este medicamento. Como hemos mencionado a lo largo del artículo, la respuesta final depende casi exclusivamente de lo que piense su médico, pero también de las enfermedades que padece y otras características del metabolismo de su cuerpo.

Por esta razón, la verdad es que podría intentar usar este medicamento, pero con dosis iniciales bajas, para saber cómo reacciona su cuerpo a la exposición a este medicamento, y luego aumentar progresivamente a dosis que son farmacológicamente activas. Recuerde, esta es una droga que tiene acción en nuestro cerebro, por lo que debemos tener cuidado.

Además, Atarax se considera un medicamento especial para las alergias, pero no es la primera opción como ansiolítico. Siempre habrá otras opciones que podemos probar si el tratamiento falla con un medicamento u otro, sin importar qué compuestos base esté usando.

Finalmente, debemos tener especial cuidado en pacientes pediátricos y adultos mayores, por lo que no recomendamos su uso en ellos a menos que su médico considere que es una opción ideal. Aun así, si se usa, debemos ser conscientes de los posibles efectos adversos y tratar de controlarlos gradualmente con otros medicamentos u otras técnicas disponibles, según lo recomendado por su médico de confianza.

Sin embargo, es necesario enfatizar que las organizaciones más importantes a nivel mundial a cargo de la seguridad de los medicamentos han determinado que Atarax es bastante efectivo y que no representa un riesgo real para nuestra salud, si somos supervisados. Por lo tanto, podemos recomendarle silenciosamente su uso, si su médico lo ha recetado.

Ansiedad: mucho más que un síntoma

Los trastornos mentales son patologías que, aunque han existido durante muchos años, la verdad es que apenas estamos consiguiendo conciencia mundial sobre su importancia y las diversas enfermedades involucradas. Aunque gran parte de la población no lo cree, estos trastornos son bastante incapacitantes y pueden prevenir la vida por completo.

La ansiedad es una de las enfermedades mentales más frecuentes y menos diagnosticadas, lo que significa que las estadísticas no reflejan realmente la prevalencia e incidencia de este trastorno. Estas son preocupaciones o temores intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones que, en teoría, no deberían causar una reacción de tal magnitud.

Por lo general, se presenta como episodios repetidos, rápidos y breves, donde el paciente experimenta mucho miedo o terror, con gran intensidad, lo que lo obliga a expresar diversas reacciones, como llorar, gritar, respirar rápido, etc.

Todos estos sentimientos son extremadamente difíciles de controlar. Cualquier pequeño evento, como cruzar la avenida, podría hacernos tirarnos al piso sin razón, mientras lloramos y nuestro corazón sin sentido se acelera.

Todo esto hace que creemos conductas de evitación fuertes que nos impiden realizar nuestras actividades de rutina. Continuando con el mismo ejemplo, tal vez no queremos volver a cruzar la calle e intentar encontrar una ruta o una forma de llegar a nuestro destino que no implique cruzar una calle específica.

Aunque hay varios, los más comunes son el trastorno de ansiedad generalizada, la ansiedad social, las fobias específicas o la ansiedad por separación. El peor de los casos es que podrían presentarse juntos como más de un trastorno que habita en un paciente.

Síntomas

Lo más interesante de esta enfermedad es que pone y demuestra el vínculo claro que existe entre nuestro cerebro y nuestro cuerpo. La mayoría de las afecciones psicológicas causadas por este trastorno tienen un claro efecto biológico que se manifiesta a través de algunas alteraciones como:

  • Aumento de la frecuencia cardíaca
  • Agitación
  • Aumento de la presión arterial
  • Aumento de la frecuencia cardíaca
  • Hiperventilación
  • sudoración
  • temblores
  • Desórdenes gastrointestinales

Sin embargo, no está limitado allí. Lo que es seguro es que también hay síntomas psicológicos importantes, como los que hemos mencionado anteriormente, como el nacimiento de conductas preventivas que implican no realizar el acto que consideramos el desencadenante.

Además, puede dificultar que nos quedemos dormidos, lo que se conoce como insomnio de conciliación, problemas para concentrarse y pérdida de control sobre nuestros pensamientos. En este estado, y en ese punto, todo lo que podemos hacer es pensar claramente (y demasiado claramente) sobre nuestras preocupaciones que nos abruman en ese momento.

Factores de riesgo

Algunos factores pueden aumentar su riesgo de ansiedad. Recuerde que la base del desarrollo de esta enfermedad son condiciones multifactoriales que no solo indican problemas psicológicos, sino también biológicos.

1. Trauma

Los adultos que tuvieron experiencias fuertes durante la infancia o que presenciaron algún tipo de evento traumático son aquellos en riesgo de experimentar un trastorno de ansiedad, especialmente durante el desarrollo y la edad adulta. De hecho, este es el mayor factor de riesgo para cualquier enfermedad psiquiátrica.

2. Estrés

El estrés no es solo un factor psicológico, sino también biológico. La respuesta de esta reacción en nuestro cuerpo causa un efecto directo en la forma en que nos desempeñamos. Por ejemplo, estar en situaciones complicadas puede aumentar los niveles de cortisol en la sangre, causando un aumento de la presión arterial, la frecuencia cardíaca y muchos otros síntomas.

La exposición prolongada al estrés es el factor de riesgo real. Esto sucede, en la mayoría de los casos, cuando hay enfermedades crónicas graves o graves que pueden mantenernos preocupados por el tratamiento y cómo evolucionará en el futuro.

Incluso pequeñas cargas de estrés pueden acumularse gradualmente hasta que la máxima expresión de este almacenamiento sea ansiedad generalizada, no solo en un evento específico, sino hacia varios tipos de comportamientos diferentes.

3. Personalidad

Hay personas más capacitadas que otras, a pesar de tener las mismas experiencias. La forma en que las personas funcionan normalmente en sus vidas e interactúan con los demás puede afectar directamente la probabilidad de que sufran este trastorno.

Entre los tipos de personalidad, quizás el tipo A, el histriónico, es el más delicado de todos y el más propenso a evolucionar hacia la ansiedad. Estos pacientes se verían en un control al menos una vez al mes con el psiquiatra cuando se agreguen varios factores de riesgo. La salud mental es tan importante como la salud física.

4. Disparadores ambientales

Finalmente, algunos comportamientos que aprendemos durante nuestro crecimiento o desarrollo también pueden ser clave para el origen de este trastorno.

Por ejemplo, el alcohol es uno de los desencadenantes más frecuentes de patologías obsesivas o trastornos psiquiátricos como la depresión, por lo que también podemos suponer que es un fuerte agente causal de ansiedad y trastornos similares.

Por otro lado, las drogas son capaces de desestabilizarnos rápidamente y causar trastornos graves en nuestra mente que se expresan fácilmente en nuestro sistema biológico.

¿Cuándo debo ir al especialista?

Para ser sincero, siempre es mejor visitar al especialista. Su salud mental es tan importante como su salud física, y no debe haber nada que lo limite de que estos dos estén en perfectas condiciones. Sin embargo, puede haber algunas señales que debe seguir.

Por ejemplo, si comienza a sentir que tiene algunos de estos síntomas que no están de acuerdo con su "normalidad" o que está teniendo problemas sociales importantes, puede ser mejor visitar rápidamente a un psiquiatra para que le brinde herramientas que necesita para llevar una vida mucho más tranquila.

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Picazón: una respuesta sensorial muy molesta

La picazón es uno de los síntomas más comunes cuando se habla de enfermedades de la piel. La picazón se refiere a un hormigueo o sensación incómoda que envía una señal a nuestro cerebro para emitir una respuesta implícita que nos obliga a rascarnos. Aunque en otros países tiene nombres diferentes, siempre significa lo mismo.

Aunque hay muchos orígenes y muchas enfermedades que pueden expresar sus síntomas a través del prurito, trataremos de centrarnos en las características más importantes de las enfermedades básicas y más relevantes relacionadas con el prurito.

Clasificación

En términos generales, hay dos tipos diferentes de prurito según su ubicación. Esta clasificación es fundamental para poder dividir ciertas patologías más graves que también podrían estar causando este síntoma.

  1. Generalizado: La picazón puede afectar todo el cuerpo, y esto se debe a condiciones sistémicas que liberan ciertos mediadores en todo el cuerpo, lo que causa picazón generalizada.
  2. Local: existen ciertas enfermedades que solo causan picazón en un área específica del cuerpo, ya que son lesiones parciales que no tienen el mismo mecanismo fisiopatológico detrás.

Etiología: llegar a la causa

Se solía pensar que la picazón era un tipo de dolor de baja intensidad que causaba una respuesta diferente, pero hoy sabemos que son dos cosas totalmente diferentes. Cada una de estas sensaciones tiene su propia vía, que permite que el cerebro dé su respuesta única.

La picazón puede ser causada por trastornos físicos, como la irritación causada por tocar una planta o un producto que desencadena una reacción de contacto, factores ambientales, reacciones alérgicas, infecciones, picaduras de insectos, etc.

Las cousas pueden ser múltiples, sin embargo, la mayoría de las veces se debe a reacciones alérgicas que implican una respuesta rápida de nuestro cuerpo. En teoría, lo que estamos haciendo es defendernos de un agente externo, llamado alergeno, que ingresa a nuestro cuerpo sin permiso. En condiciones normales podemos limitarlos, pero a menudo desencadenan este tipo de respuesta.

En cuanto al mecanismo fisiológico, se sabe que hay varias moléculas involucradas en el desarrollo y el origen de este síntoma, como el péptido natriurético B, que parece gobernar la transmisión de información al cerebro.

Se han llevado a cabo varios experimentos para descubrir qué tan bien funciona, independientemente de la causa por la que se desencadena. Los científicos suponen que hay diferentes rutas y caminos que se activan según el origen del síntoma.

Por ejemplo, las reacciones alérgicas pueden estar mediadas por alérgenos, pero también puede implicar la liberación (directa o indirecta) de ciertos mediadores relacionados con la picazón, causada por hongos, bacterias, productos químicos e incluso golpe de calor.

Diagnóstico: ¿cómo llegar a la causa?

En primer lugar, debe consultar a un médico (ya sea un médico general o un dermatólogo) que realizará un examen físico completo para descubrir si la causa es generalizada o local, y podrá acercarse un poco más al diagnóstico. Recuerde, lo más importante es que siempre lo evalúa una persona que sabe lo que está haciendo.

En la mayoría de los casos, lo que sucede es que el especialista llega al diagnóstico sin la necesidad de ningún otro examen para evaluar otra posible causa, y de inmediato procede a dar un tratamiento sintomático y se orienta al agente causal para eliminar su trastorno.

Sin embargo, a veces, para llegar a la causa, necesitamos realizar algunas pruebas que puedan confirmar nuestras sospechas. Algunos de los más frecuentes son:

  1. Análisis de sangre: el hemograma es clave para identificar los posibles trastornos subyacentes a la picazón. Esto, junto con el examen físico y el historial médico son el secreto para un diagnóstico rápido y temprano. Por ejemplo, si los eosinófilos (glóbulos blancos) están agrandados, podemos pensar en una infección parasitaria.
  2. Pruebas específicas: también se pueden hacer pruebas para determinar el estado de su riñón, tiroides e hígado. Cualquiera de estos órganos podría causar picazón si hay una patología capaz de desencadenarla. Por ejemplo, la parasitosis en el hígado puede causar picazón general.
  3. Radiografía y ultrasonido: también pueden ser necesarios estudios de imágenes para dividir las patologías que causan la enfermedad. Por ejemplo, el agrandamiento del bazo o el hígado también puede conducir a una causa infecciosa.

Tratamientos y opciones

El tratamiento generalmente se enfoca en aliviar los síntomas tanto como sea posible. No todas las enfermedades son lo suficientemente débiles como para disminuir la picazón por completo, por lo que pueden ser necesarios algunos medicamentos más potentes. Algunas de las opciones que tenemos disponibles son:

1. Antihistamínicos

Estos son el centro de tratamiento para todas las enfermedades, especialmente aquellas que son más débiles o requieren menos medicación para ser tratadas. De hecho, algunas reacciones relativamente graves se pueden tratar con antihistamínicos orales o intravenosos. Sin lugar a dudas, son bastante útiles y una piedra angular en el tratamiento de la enfermedad causal.

2. Corticosteroides

Los corticosteroides son el tratamiento de segunda línea. Medicamentos capaces de mitigar casi cualquier reacción relacionada con la liberación de mediadores por los glóbulos blancos. Estos se usan incluso en casos graves de asma, por lo que serán efectivos para mitigar las reacciones que causan picazón.

Una de las causas más graves es la reacción alérgica complicada, donde incluso el paciente puede morir. Los corticosteroides son un arma específica e ideal para tratar este tipo de patologías. Algunas de las opciones más utilizadas son dexametasona y betametasona, por vía intravenosa, o prednisona, por vía oral.

3. Otros medicamentos

Existen muchos otros medicamentos que pueden usarse según el tipo de reacción y la causa del paciente. Por ejemplo, se pueden usar algunos inhibidores de la calcineurina, como el tacrolimus, o quizás algunos anestésicos que inhiben cualquier reacción en la región que tocan, como la doxepina.

El tratamiento de la picazón es necesario. Este síntoma puede afectar radicalmente nuestro estilo de vida o progreso y volverse aún más complicado. Aún así, recuerde que necesita ver a su médico y no tomar decisiones por su cuenta.

By: Noam Harel, MD

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